Si bien Amazon se ha situado como compañía pionera en áreas como el comercio electrónico, el cloud computing o los e-books, con su lector Kindle, aún tiene mercados en los que debe luchar por hacerse un hueco. Uno de ellos es el casi recién nacido negocio de las tabletas que inició Apple con su iPad.
Para tratar de hacerse con una cuota en el mercado de las tabletas, se dice que la compañía ya habría encargado a la fabricante taiwanesa Quanta Computer (que trabaja también para otras tecnológicas como Sony o RIM) la producción de entre 700.000 y 800.000 dispositivos mensuales a partir del segundo trimestre del año, según Digitimes.
La tableta de Amazon funcionaría sobre sistema operativo Android y contaría con una pantalla fabricada por E Ink Holdings, una empresa de tinta electrónica que ya trabaja para el Kindle y que ha demostrado poseer una tecnología que garantiza nitidez y legibilidad.
Amazon tendrá que crear una nueva estrategia que permita popularizar sus tabletas sin quitarle protagonismo al que hasta el momento es su dispositivo estrella, el lector de libros electrónicos Kindle. Al parecer, la empresa estaría planteándose diversas estrategias para reducir el precio del Kindle y conseguir una mayor penetración fuera de Estados Unidos y Europa.