Los servidores de Grum, una red zombi con unas 120.000 direcciones IP involucradas para enviar correo electrónico no deseado (spam), han sido desactivados en una operación desarrollada en varias fases, ha explicado la empresa de seguridad informática EyeFire.
Grum era una botnet, red de computadores controlados a distancia para enviar correos electrónicos o servir de soporte a estas operaciones, responsable del 18% del spam mundial, según fuentes del sector.
De acuerdo con datos de Spamhaus, usaban una media de 120.000 direcciones IP, el número desde el que se conoce el acceso a Internet de un determinado equipo, para mandar spam cada día, algo que consiguieron reducir a poco más de 21.000 tras la desconexión de algunos de esos servidores.
La operación, según EyeFire, ha contado con la participación de expertos en seguridad informática y usuarios comunes. La red funcionaba dividida en dos sectores, uno controlado desde Panamá y otro desde Rusia, aunque también había servidores en los Países Bajos.
Una vez desactivados los servidores neerlandeses, la botnet los reemplazó por seis nuevos servidores en Ucrania, un país en el que nunca ha sido fácil terminar con estas operaciones, afirman EyeFire en su blog, aunque el pasado 18 de julio consiguieron desactivarlos.
Por su parte, el servidor ruso también fue desactivado a petición de EyeFire, que asegura que todavía quedan computadores infectados, aunque en menor medida.
Fuente: EFE.