El antiguo director ejecutivo y ex presidente de Microsoft, Bill Gates, ha hablado en una entrevista sobre el nuevo sistema operativo de Microsoft, Windows 8, y de la importancia que tiene para el futuro de la multinacional.
Tanto la versión definitiva de Windows 8 como las primeras tabletas de la compañía, Surface, llegarán el próximo 26 de octubre. La expectación de expertos y usuarios es máxima ya que buscan comprobar si los nuevos dispositivos de los de Redmond serán capaces de competir con los ya existentes en el mercado y cuál va a ser la acogida del nuevo sistema operativo.
Desde Microsoft apuestan ciegamente por estos dos nuevos productos, así como la nueva versión del SO móvil, Windows Phone 8. Ahora, el fundador de Microsoft, Bill Gates, ha hablado con entusiasmo sobre el potencial de Windows 8 y Windows Phone 8 y ha subrayado lo importante que es este lanzamiento para la compañía.
«Este es un producto absolutamente fundamental», asegura Gates. «Introduce a Windows en el mundo de los dispositivos táctiles de baja potencia —se trata de darle a la gente la mejor de la experiencia tableta y la experiencia de PC».
En años anteriores, Gates trató de dirigir Microsoft hacia lo que él veía como «interfaces naturales de usuario» —un término general para el uso de otros métodos de entrada, además del mouse y el teclado, como el tacto y la voz—. Ya en el año 2001, Gates mostró una tableta como el dictado de voz. Ahora Microsoft está apostando fuerte por este tipo de nuevas interfaces con Windows 8.
«Microsoft está mezclando los diferentes tipos de entrada», dice Gates. «La entrada de voz, muy importante. La entrada de la cámara, que ahora se ve en el mundo de la televisión, también será parte de la experiencia de PC».
Gates es también una de las primeras personas en tener una tableta Surface, y asegura que se lo ha mostrado con orgullo a tantas personas como ha sido posible. «Surface encarna la idea de: «¿Puedes conseguir una tableta aún mejor pero que también tenga lo que usted esperaría de un PC?».
Gates renunció a su cargo de director ejecutivo en el año 2000 y terminó su actividad en la compañía en el año 2008 para dedicarse por completo a la Fundación Bill & Melinda Gates.